Como parte integral de esta institución intensiva en personas, me encuentro entre los 12,000 colaboradores que contribuyen activamente a la realización de la misión y visión institucional. Cada uno de nosotros aporta con su experiencia, conocimiento y cualidades personales, convirtiéndonos en el motor que impulsa el logro de los grandes objetivos institucionales.
La esencia de nuestra labor diaria se centra en brindar a nuestros estudiantes una experiencia transformadora. Nos comprometemos a ofrecer servicios de calidad y programas educativos que se ajusten a las realidades locales y nacionales. Lo destacable es que, como institución, estamos siempre atentos a los cambios sociales, evolucionando y adaptándonos para abordar temas como género e inclusión.
La valoración que damos a las personas en Santo Tomás es inestimable. Conscientes del impacto que generamos en la sociedad, nos esforzamos por retener y atraer a los mejores talentos. Estamos comprometidos con el desarrollo de nuevas generaciones, reconociendo sus demandas y procurando equilibrar la vida laboral y personal de nuestros colaboradores.
En nuestra institución, la gestión de clima laboral es una prioridad, buscando proporcionar un ambiente donde cada individuo pueda liberar su potencial y alcanzar sus objetivos. A través de iniciativas como reconocimientos por altos desempeños, oportunidades de desarrollo interno y programas que fomentan el equilibrio entre la vida laboral y personal, procuramos construir un equipo diverso y comprometido.
Somos conscientes de la importancia de nuestro papel en la formación de jóvenes y adultos, y nos enorgullece ser parte de historias inspiradoras de superación. Observar a aquellos que han decidido estudiar, incluso en circunstancias complejas, y alcanzar el éxito profesional dentro y fuera de la institución, es verdaderamente emocionante.
La identificación con la misión de formar parte del desarrollo de otras personas se renueva constantemente. Cada decisión que tomamos como colaboradores puede tener un impacto significativo en la vida de los demás. Personalmente, estoy consciente del poder que tiene mi rol en la gestión de clima y desarrollo interno, y cómo estas decisiones afectan la salud y el bienestar de las personas y sus familias.
El sentido de equipo es fundamental en Santo Tomás, y cada colaborador, aunque aporta de manera individual, contribuye colectivamente al éxito de la institución. En el marco de la mejora continua, nos esforzamos por revisar y actualizar nuestras directrices, adaptándonos a los cambios en el país y anticipándonos a las necesidades emergentes.
Miramos hacia el futuro con un proyecto ambicioso que se enfoca en la proyección y desarrollo de los colaboradores críticos. Buscamos prepararnos para las transiciones y brechas, capacitar y desarrollar a quienes forman parte fundamental de la institución. Esta mirada de futuro impulsa nuestro compromiso constante con la excelencia y la evolución, siempre con una perspectiva crítica y autocrítica para asegurar la calidad y relevancia de nuestra labor educativa.